Llevo meses sin pasar por aquí, realmente pienso y repienso la enfermería a diario, no siempre la vida me permite plasmarlo en unas líneas. Intento compartirlo con quienes me rodean, incluso en este momento de ajetreo vertiginoso al que nos ha abocado la emergencia sanitaria por la pandemia COVID - 19.
Hoy me permito parar, la ocasión lo merece, quiero conectar conmigo y con mis valores esenciales en relación a la profesión de la que formo parte. Acabo de llegar al despacho, es domingo 10 de mayo y son las 13:45 horas. Vengo de estar con enfermeras que están hoy trabajando en primera línea, y que mañana volverán, en esta ocasión formarán a sus compañeras para adaptarnos a las nuevas realidades, a los nuevos protocolos. Me han hecho pensar, y repensar, y lo agradezco. ¿Hacia dónde vamos? hacia un mundo que necesita salud y cuidados, éste es nuestro mundo y para ello la sociedad y el sistema necesita re-situarse, porque lo que era antes ya no es y nunca volverá a ser.
En mi opinión, con los años de experiencia y peinando canas (ahora más que nunca) las líneas básicas pasan por: refuerzo en personal; más presencia de cuidados en la toma de decisiones e inversión.
1. Refuerzo de enfermeras, matronas y auxiliares de enfermería. Hacer más con lo mismo no se puede, llevar a la población hacia la Salud es un auténtico reto, siempre presente y ahora magnificado por la actual situación sanitaria donde la inequidad se dispara, preocupa toda la sociedad y en especial los vulnerables, que necesitan cuidados y cuyos flujos de llegada al sistema sanitario serán dispares porque no todos dispondrán de los mismos recursos, esto es inaceptable desde el punto de vista ético, político y social.
Tanto en la emergencia sanitaria como para dar continuidad a la asistencia habitual dentro de esta desescalada, nueva normalidad o cambio de paradigma (como prefiero llamarlo) se necesitan más profesionales, y los perfiles a mi juicio están claros: hablamos de cuidados.
2. Más presencia de cuidados en la toma de decisiones sanitarias: liderazgo y gestión. El "lenguaje llano de cuidados" que contacta con la población, se soporta en el "cuidado profesional" que aporta la profesión enfermera a la sociedad. Este lenguaje y su narrativa debe formar parte de las mesas de debates y toma de decisiones, de los comités de expertos. Es básico, si la sociedad necesita ser cuidada, que el experto en cuidados asesore sobre la mejor forma de hacerlo. De la otra manera es "contra-natura", no puede ser que sobre una decisión tomada se tenga que "repensar" cómo traducir al lenguaje de los cuidados, esta cuestión que puede pasar desapercibida es clave para que el sistema fluya y la población reciba lo que legítimamente le pertenece.
Soy consciente de que este punto requiere de madurez, profesional (que existe) y también social y cultural: son muchas las barreras y prejuicios, también los techos de cristal socioculturales, económicos y del propio sistema sanitario. Igualmente digo, como profesión tenemos la responsabilidad de estar, de buscar oportunidades y de mirar más allá.
3. Inversión. No sólo se trata de contratar personal, se trata de invertir en:
- Formación especializada: más plazas, más perfiles, más creatividad, nuevos ámbitos donde desempeñar su labor, normativa que permita su contratación, y todo lo anterior sin descuidar al resto.
- Formación continuada: más allá de lo virtual es necesario invertir en la tutorización, en la adquisición de competencias para los nuevos retos a los que se enfrentan generalistas, especialistas y de práctica avanzada. Con criterio de seguridad, como siempre, pero en terreno, donde se aprende y se mejora.
- Infraestructura: trabajar bien requiere de espacios y dotación. También de flexibilidad horaria y plasticidad, aquí tendremos que sumar esfuerzos todos y todas, porque nada volverá a ser como antes, ni en el sistema sanitario ni en el conjunto de la sociedad, un ejemplo claro: ¿volverá la escuela a ser como era?; ¿volverán nuestros hijos e hijas a las aulas en las mismas condiciones que en enero?; ¿será necesario pensar en nuevas fórmulas?
- Promoción, prevención y trabajo comunitario, en todos los ámbitos y especialmente en la Atención Primaria. Fomento del autocuidado y la educación para la salud, muchos de nuestros pacientes han caído en el "descuido" por la alarma sanitaria, tendremos que seguir combatiendo la creciente demanda por las enfermedades no transmisibles: tabaco, alcohol, dietas malsanas, actividad física insuficiente. No nos olvidemos de la salud mental y del impacto que esta epidemia está teniendo en nuestra población, los estilos de vida saludables son un pilar fundamental para salir adelante.
Todo lo anterior requiere de inversión, insisto más con lo mismo no se puede. Y sí, estamos llevando el mundo hacia la Salud, con muchas dificultades, nada nuevo, este es nuestro mundo y a mí personalmente me gusta pensar que cada día trabajo para cambiarlo.
Feliz Día Internacional de la Enfermera y la Matrona. Gracias a todas/os por estar, por sumar, por sacar esto adelante, por mi parte tienen el compromiso de que seguiré trabajando incansablemente por "nuestro mundo".